viernes, 19 de septiembre de 2014

Capítulo 3. El segundo día
 Ya había amanecido, y Elsa se sentía muy animada y de muy buen humor. Sin duda, aquel otro día había sido perfecto, y uno de los más divertidos en la vida de Elsa. Se vistió y, como Jack seguía durmiendo, decidió vengarse por como la había despertado el día anterior, arrojándole una bola de nieve el doble de grande de la que él le había tirado.

-Auch que fue eso? Jack se levantó de golpe por el susto.

-Buenos días dormilón, levántate que hoy hay mucho por hacer.

-Como tú digas.  Y se le escapó otra de sus sonrisas traviesas. Después agregó:

-Toma, te hice unas zapatillas sin tacón para que estés más cómoda y sin duda para que camines más rápido.

-Pues, no se si agradecerte o arrogarlas en tu cabeza.

-Jajajajaja, eres chistosa.

-De acuerdo, las usaré. *Para que las haya hecho él... son muy bonitas*

-Genial.

 Salieron de la habitación corriendo para ver quién llegaba más rápido a las escaleras, riéndo, como dos pequeños niños.

-Hey, no es justo, tu volaste antes de llegar. Le dijo Elsa tratando de recuperar el aliento.

-Jajajaja de acuerdo, me pillaste. Quieres intentar algo más divertido?

-Jajajaja claro!.. ejem, es decir... si, lo-lo intentaré *cálmate elsa, eres una reina, recuerdas?*

-Pues sube.

 Jack la tomó de la cintura y la sentó en la barandilla de las escaleras para que se deslizaran juntos.

-No, Jack qué haces? Yo... no me deslizaré! Dijo no muy convencida.

-Tranquila, no te pasará nada, yo te cuidaré. Mira, es fácil, yo me deslizaré primero y te mostraré como se hace.

  Dicho esto Jack se tiró gritando de alegría. *Lo hace parecer tan fácil*. Pero Elsa nunca había hecho algo como esto y estaba asustada, siempre estuvo encerrada en su dormitorio y nunca supo que era divertirse de verdad o hacer travesuras como esta. Pero confiaba en Jack. Así que lo hizo, se tiró cerrando los ojos con fuerza por la barandilla.

-JAJAJJA SIII, esto es genial!

  Y cuando llegó al final de la barandilla salió volando, pero Jack estaba ahí, para sujetarla para que no se cayera.

-Te tengo.

-Viste eso! Fue genial. Es lo más divertido que he hecho en mi vida!.... Em.. digo.. *tranquilizate, estas muy exasperada, Elsa* ya.. ya puedes bajarme.

-Pero no quiero.

  Elsa puso cara de divertida y le tiró una pequeña ráfaga de viento a la cara de Jack para que la soltara. Se rieron un buen rato. Él tomó su mano y la llevó fuera del palacio.

-Bueno, te enseñaré a deslizarte, pero por los aires.

-QUE DICES?!

-Soy el instructor, asi que debes hacerme caso. Dijo con voz chistosa, imitado a un capitán.
-No te preocupes es muy fácil solo hay que moverse antes de que el hielo se desintegre. Así.

  Jack formó una fina capa de hielo, suficientemente grande como para pisar, con un pie, luego hacía lo mismo para pisar con el otro pie. Y así sucesivamente. Era como correr en el aire sobre una pista de hielo que se desarmaba a cada paso que dejaba atrás. Jack corrió por encima de un acantilado, para mostrarle a Elsa que no podía caerse si lo hacía rápido y con confianza. Pero ella no quería hacerlo. Siempre fue insegura y temía que sus poderes le fallaran por el miedo y se callara al precipicio. Cuando Jack voló luego de deslizarse sobre el aire, se fijó en su mirada y animándola le dijo:

-Oye yo te cuidaré si te caes, una vez que lo tengas sera imposible caerte. Confía en mí.

-Yo... *suspiro* lo.. lo inentaré.

  Primero se fijó que tan profundo era el precipicio. deaciado profundo. Tomó aire y empezó a deslizarse.

-Vas bien! Por ahora no te caíste ese es un buen comienzo. Le gritó Jack a lo lejos.

  Ella se puso nerviosa de fallar frente a Jack y perdió el equilibrio y cayó. Jack se rió un poco y se dijo a sí mismo:

-Cada día, me gusta más.

  Y voló hacia el precipicio para agarrarla. La tomo de la mano mientras caía y antes de que toque el suelo, la alzó como si fuera un bebé una vez más, pero esta vez con más fuerza y cariño. Él no se equivocaba, se estaba enamorando de aquella pequeña chica con poderes que ahora se convirtió en una bella e increíble mujer. Pero no estaba muy seguro de que ella lo amara o si estaba enamorada de alguien más. *Es tan difícil entender a una persona cuando es tan fría como ella.* pensó * Aún así, haré que se enamore de mí, tendré que derretir ese corazón tan frío que tiene.*

 Mientras tanto Elsa gritaba y se reía, no entendía si de la alegría, de pánico o de que estaba en los brazos e Jack, una vez más. No sabía como explicar lo que sentía por ese chico. Jack era tan bueno, se preocupaba por ella y la hacia reír como nadie más... Además de lo lindo que era. Pero Elsa, sí estaba segura que nadie podriá amar a un mounstro como ella. Alguién que podría congelarlo todo, incluyendo a los que ama. Así que lo mejor sería no contarle a Jack de sus sentimientos hacia él y olvidarse de ellos.

 Jack dejó a Elsa nuevamente en tierra firme y antes de que él pudiera decir algo ella le dijo:

-Intentémoslo de nuevo!

Jack se sorprendió por la respuesta y su entusiasmo y no pudo evitar sonreír satisfactoriamente.

A continuación, Elsa salió disparada, como una flecha, corriendo por los aires, mientras Jack le seguía el paso.

-Jajajajaj se te antoja una carrera?

-Adelante.

 Parecían dos relámpagos veloces que corroan por distintas direcciones, haciendo zig zag y dando vueltas por los aires. La estaban pasando súper bien. Jack no podía quitarle los ojos de encima. Elsa era, sin duda, la mujer más hermosa de todas, o eso sentía él. Era divertida y grandiosa... cuando pensaba en ella su corazón se aceleraba. Sin darse cuenta que había un árbol alto en frente, Jack chocó y cayó al suelo. Elsa lo socorrió rápidamente.

-Esto es genial! Quién podría pensar que estuve volando? Bueno casi pero es lo más divertido que he hecho! Cuando Anna se enterre de esto...... ah... oh.. Estas bien? Como no viste ese árbol?

-Si, estoy bien, el árbol se puso en mi camino y me atacó, nada grave.

 Elsa no pudo evitar reírse de sus payasadas.

-Jack, estás herido! Tienes sangre en la cabeza, espera.

 Se dirigió a un pequeño estanque con agua congelada, y con sus poderes descongeló el hielo, arrancó un pedazo de tela de su vestido, lo mojó y se lo llevo a Jack para colocárselo en la herida.

-Te pondrás bien, es solo una herida.

-Gracias, no sabía que por admirar tu belleza podía hacerme daño.

-Oh... Elsa no pudo evitar sonrojarse.

-Tampoco sabía que eras enfermera.

Luego de un rato, Jack se levantó y siguieron su camino, esta vez a pie.

-Wow no sabía que supieras romper el hielo sobre el agua. Me impresionas. Una cosa menos que tendré que enseñarte porque,  por lo visto ya lo sabes.

-Yo... no se como lo hice. Te ví herido y surgió de mí. Es complicado de explicar.

-No te preocupes, te entiendo, cuando quieres a alguien nada es imposible.

-Bueno.. yo... no me refería a eso....

-JAJAJAJAJ ya los se tonta, estoy bromeando. Dijo con cariño


 Ella se rió

-Lamento lo de tu vestido.

-oh no es nada.
  Elsa alzó su mano y unos pequeños copos de nieve rellenaron el espacio faltante de su vestido.

-Genial.

-Uuhh... no tienes frío?

 Elsa estaba abrazada y empezaba a tener frío, eso era extraño porque a ella el frío no era algo que le molestara pero ese era un día muy frío sin duda. Estaban en pleno invierno.

-Ten... Jack se sacó su buzo azul que traía siempre. Cada vez era más dulce con Elsa.

  Ella se puso nerviosa y se sonrojó, un chico con el torzo desnudo en un día de frío no era algo que se veía todos los días. *Tengo que admitir que tiene un buen cuerpo.... que? que estoy diciendo? debo calmarme,
recuerda que él no podría amar a alguien como yo*

-Gr.. Gracias, Jack...

-Sabes Elsa? Mañana hay un gran baile en un pueblo detrás de las montañas... Me preguntaba... si tú... *suspiro* quisieras ir con migo? Se que no soy un príncipe ni nada, no estoy a la altura de una reina como tú pero...

-Oh Jack... por supuesto que quiero ir contigo.

-...Si no quieres no me enojaré, no hay problema... Espera, que?

-Si, quiero ir contigo.

-Deberas? Ay Elsa me hiciste el hombre más feliz de todos.

  La tomó de la cintura y le dió una vuelta por el aire. Estaba muy feliz y ella también.

-Pero no tengo vestido. Elsa estaba más sonriente que nunca.

-No hay problema, yo no tengo traje pero podemos fabricarlos! Lo siento.. estoy gritando, es que estoy muy felíz..

-Jajaja, sabes? creo que está anocheciendo, deberíamos volver.

-Una carrea?

-Considérate perdedor.

  Volaron riéndose. Al final no importaba quién ganara la carrera hasta el palacio, disfrutaban más la compañía del otro que cualquier otra cosa. Llegaron antes que la noche cayera. Encendieron otra fogata, comieron manzanas y hablaron casi toda la noche.

-Tu le diste vida a Olaf?

-Ajam.

-No sabía que podíamos hacer cosas que cobraran vida.

  La fogata estaba apunto de apagarse y ellos ya no daban más de tanto reírse.

-JAJAJAJA, ejem.. bueno creo que es hora de que vayamos a  dormir, no?

-Claro.

-Ah y te devuelvo tu buzo, muchas gracias.

-Seguro que no lo necesitarás? Esta noche hará mucho frío.

-No te preocupes por mí.

-Pero eso es lo que quiero hacer.

  Elsa sonrió. Subieron a la habitación. Se dijieron buenas noches, y se acostaron en sus camas. Al rato, Elsa despertó a Jack.

-Jack lo siento, pero... Estoy muerta de frió.

-Mi buzo no te servirá... Quieres acostarte con migo? Jack lo dijo con total sinceridad. No quería hacer nada que ella no quisiera, pero no permitiría que se muera de frió por la noche. Su única intención era mantenerla a Elsa a salvo.

-Tranquila. Pero no dejaré que te congeles.

-Gr.. gracias Jack.





  Elsa se acostó en la cama de Jack, a su lado. Como es que él no sentía el frío? Su cuerpo, que siempre estaba frió, esta vez... estaba caliente y su corazón latía con rapidez. Él la abrazó, Elsa reposó su cabeza en el pecho de Jack y este tomó su mano. Susurrando le dijo:

-Descansa, Elsa.

-Hasta mañana, Jack.

-Puedo decir una locura?

-Claro.

-Te...te quiero, Elsa.

  Ella le sonrió y lo abrazó con más fuerza, estaba muy cansada y se durmió en poco tiempo.

Fin del Capítulo 3

No hay comentarios:

Publicar un comentario